Por: Natalia Sandino y Andrea Lozano, grado 11.
Se la pasa en el colegio, pero no ha aprendido nada de matemáticas, ciencias sociales ni español, no se sabe los verbos en inglés ni los elementos de la tabla periódica, se la pasa distraída y no contesta lista, sin embargo se ganó el cariño de profesores, estudiantes, personal del colegio y visitantes, sobre todo los niños con los que le encanta jugar. Seguro que ya sabes de quién hablamos, de la mascota de nuestra institución
.
Según
José Manuel García, uno de los vigilantes de la sede central “Motas tiene dos
años y tres meses no es arisca y le gusta jugar con la pelota” llegó a la institución a finales de 2019 y afortunadamente
no tuvo que vivir sola la pandemia, según la secretaria Luz Marina “al principio
la profe Lida le traía comida y en pandemia se la traía yo, ahora nuevamente le
están trayendo comida la profe Lida y el profe Pablo y aquí le ponemos agüita y
ella nos acompaña por acá, ella mantiene pendiente de los padres adoptivos”
agrega.
Motas
es muy alegre y juguetona, ya ha dañado muchos balones, pero también eso se lo perdonamos porque su simpatía es otra de las
caras alegres de nuestra institución.
